San Juan Pablo II patrón de
En 1938, él y su padre dejaron su ciudad natal de Wadowice y se trasladaron a Cracovia, donde se matriculó en la Universidad Jagellónica, donde estudió filología y varios idiomas. Aunque tuvo que participar en el entrenamiento militar obligatorio durante este tiempo, se negó a disparar un arma. Durante sus estudios, también aprendió hasta 15 idiomas.
En 1958, fue nombrado obispo auxiliar de Cracovia por el Papa Pío XII. Recibió la consagración episcopal el 28 de septiembre de 1958 y fue el obispo más joven de Polonia, con 38 años. Se convirtió en administrador temporal de la archidiócesis en 1962, tras la muerte del arzobispo Eugeniusz Baziak.
Participó en el Concilio Vaticano II entre 1962 y 1965, donde realizó aportaciones a Dignitatis humanae y Gaudium et spes, dos de los productos más históricos e influyentes del Concilio.
En 1964, fue nombrado arzobispo de Cracovia por el Papa Pablo VI y fue promovido al Colegio Cardenalicio en 1967. Fue clave en la formulación de la encíclica Humanae vitae, que trata sobre el aborto y el control artificial de la natalidad.
Cómo murió Juan Pablo II
En el aeropuerto gallego de Labacolla fue recibido por los Reyes de España, Juan Carlos y Sofía, que estaban acompañados por miembros del Gobierno y el presidente y representantes de la Xunta de Galicia.
El Papa recordó que se trata de su tercera visita a España y rompió el protocolo nada más llegar para acercarse a los miles de jóvenes de todas las nacionalidades que le esperaban tras las barreras.
A continuación, condenó la mentalidad consumista “que vacía lentamente el amor de su contenido trascendente” y predicó el compromiso cristiano “que lleva a la fecundidad del amor, a través de los hijos, que deben ser el fruto vivo del amor de sus padres, y no el fruto de un amor caprichoso y arbitrario, que admite y rechaza a los hijos”.
Tras una recepción con los Reyes, el Papa se trasladó al convento de San Francisco, donde se unió a un grupo de peregrinos para recorrer los últimos cien metros del Camino de Santiago hasta la Plaza del Obradoiro. Desde Santiago de Compostela, el Papa viajó a Covadonga, en Asturias.
San Juan Pablo el Grande
Durante su reinado, el Papa Juan Pablo II (“El Papa Peregrino”) realizó 104 viajes al extranjero, más que todos los papas anteriores juntos. En total, recorrió más de 1.167.000 km. Siempre atrajo a grandes multitudes en sus viajes, algunas de ellas entre las más grandes jamás reunidas. Mientras que algunos de sus viajes (como a Estados Unidos e Israel) fueron a lugares que ya había visitado Pablo VI (el primer Papa que viajó mucho), muchos otros fueron a países que ningún Papa había visitado antes.
El primer viaje al extranjero del Papa Juan Pablo II fue una visita a tres países, la República Dominicana, México y las Bahamas, en enero de 1979. Se cree que unos 18 millones de personas saludaron al Papa durante su estancia en México.
La segunda visita del Papa al extranjero fue a su país natal, Polonia, en junio de 1979[5], posiblemente el más significativo de todos sus viajes, ya que, según algunos historiadores, puso en marcha una serie de acontecimientos que condujeron a la creación del sindicato Solidaridad, que fue un movimiento clave en la caída del comunismo en Europa del Este. Durante su visita a Polonia, Juan Pablo II visitó Varsovia, Gniezno, Cracovia, Nowy Targ, Auschwitz y Jasna Gora. La gira de nueve días atrajo a millones de fieles.
Quién fue Papa antes de Juan Pablo II
Mientras se dirige a Polonia, tierra de reyes, de santos y de la Divina Misericordia, siga los pasos de San Juan Pablo II. Desde el lugar donde nació y fue bautizado, hasta el lugar donde se convirtió en Sacerdote – Obispo – Cardenal, y donde pasó su tiempo de visita como Papa. Visite el Santuario de la Divina Misericordia (en Lagiewniki) y acérquese a la vida de Santa Faustina y a su mensaje de la Divina Misericordia. Una de las obras de misericordia más evidentes, y quizá la más difícil de poner en práctica, es perdonar a los demás. Esta peregrinación te enseñará, y te permitirá, ser capaz de perdonar.
Mientras te diriges a Polonia, tierra de reyes, de santos y de la Divina Misericordia, camina tras las huellas de San Juan Pablo II. Desde el lugar donde nació y fue bautizado, hasta donde se convirtió en Sacerdote – Obispo – Cardenal, y donde pasó su tiempo de visita como Papa. Visite el Santuario de la Divina Misericordia (en Lagiewniki) y acérquese a la vida de Santa Faustina y a su mensaje de la Divina Misericordia. Una de las obras de misericordia más evidentes, y quizá la más difícil de poner en práctica, es perdonar a los demás. Esta peregrinación te enseñará, y te permitirá, ser capaz de perdonar.