Visitar Praga en octubre
Como mencionamos en nuestra sección sobre el clima checo, el tiempo en Chequia no se puede predecir con mucha antelación y puede variar notablemente de un año a otro. En general, las mejores posibilidades de que haga buen tiempo son a finales de la primavera y principios del otoño, es decir, en la segunda quincena de mayo y los meses de junio y septiembre. El tiempo
Si le gusta el calor, debería visitar Praga en julio y agosto, los meses más cálidos y estadísticamente más secos. También hay que tener en cuenta las horas de luz, que son largas a finales de la primavera y el verano (hay luz hasta las 9 de la noche en mayo y hasta las 10 de la noche en julio) y más cortas en otoño (8 de la noche en septiembre).
Praga está más concurrida en los meses de verano de julio y agosto. El final de la primavera y el principio del otoño son un poco menos turísticos: sigue habiendo mucha gente, pero no es abrumadora. Las épocas más tranquilas son los meses fríos de noviembre, enero, febrero y hasta marzo, así que si no le importa el frío y prefiere menos turistas, ésta sería una buena época para viajar a Praga. Los días son más cortos en invierno y anochece entre las 16:30 y las 17:30 en los meses de invierno.
Restricciones de viaje en Praga
¿Está planeando su viaje a Praga, en la República Checa? Tiene que tener en cuenta varias cosas, entre ellas cuándo es la mejor época para visitar Praga desde el punto de vista meteorológico y económico. Lea nuestra guía sobre la elección de la buena temporada para viajar a Praga para disfrutar mejor de su tiempo en la capital de Chequia.
CUÁNDO VISITAR PRAGAEn Praga, o en general en la República Checa, hay cuatro estaciones bien diferenciadas: primavera, verano, otoño e invierno. Pero es difícil predecir el tiempo con mucha antelación, sobre todo si tenemos en cuenta los cambios climáticos que ha sufrido el mundo. Si quiere decidir cuándo visitar Praga según la estación del año, sin pensarlo mucho, la buena elección sería cualquier mes entre marzo y septiembre, aunque siguen teniendo pros y contras.Siga leyendo para saber cuál es el mejor mes para visitar Praga.
La primavera es una época bonita y agradable para viajar a Praga. Las temperaturas pueden ser todavía un poco frías, especialmente a primera hora de la mañana o a última de la tarde, pero cuando el sol empieza a brillar, la ciudad se calienta rápidamente.
Praga en noviembre
No es raro que durante el verano las temperaturas alcancen los 35°C (95°F), y en invierno puede hacer hasta -15°C (5°F). La temperatura máxima media de mayo a septiembre es de 22°C, con una media de 12°C de mínima y una media de siete horas de sol al día.
La primavera y el verano son las estaciones más soleadas, mientras que el periodo entre mayo y agosto es el más lluvioso; las tormentas y los chubascos repentinos son habituales, por lo que no hay que olvidar el paraguas. La cantidad de precipitaciones es bastante constante a lo largo del año, con un poco más en primavera y otoño y alguna tormenta ocasional en verano.
La época más barata para visitar Praga
La República Checa se está haciendo poco a poco increíblemente popular en el mercado turístico mundial. Hasta ahora, ha sido una joya poco explorada, un lugar con una arquitectura impresionante, gente cálida y un paisaje extraordinario. Bienvenido al corazón de Bohemia, a algunos de los mejores monumentos y calles empedradas que le harán sentir que ha entrado directamente en una película de la época medieval.
Ya sea en Praga o en Cesky Krumlov, tiene que asegurarse de elegir la mejor época para visitar la República Checa. Así te asegurarás de obtener lo mejor de lo que te ofrece la ciudad. Hay algunas estaciones en las que el tiempo en la República Checa es demasiado bueno para perdérselo, pero hay algo especial en cada una de ellas. Siga leyendo para saber cuál es la mejor época para visitarla.
La República Checa es un país único, con influencias de Europa Occidental y tradiciones eslavas al mismo tiempo. Es el hogar del Renacimiento bohemio, de los impresionantes montes Sudetes, de una notable arquitectura medieval y de bares subterráneos que nunca se cansará de descubrir. Durante mucho tiempo, la República Checa se ha visto eclipsada por Alemania y Austria, por lo que sigue estando poco explorada en comparación con el resto de Europa.